Erase una vez asuntos no resueltos del Ser, la Consciencia y el Amor

En algunas culturas orientales (principalmente china y coreana) se considera que el amor a consciencia entre los humanos, transcurre a través de dos grandes momentos: 1) Cuando el amor llega… Hummm. 2) Cuando el amor se va… Aghhhh. De manera similar, la vida de todo ser humano se resume y transcurre entre, nuevamente, dos grandes momentos: 1) El ser, el yo real aquí y ahora. 2)El Querer-ser, lo que quiero ser Yo en el futuro mediato e inmediato.

En el ínterin podemos, si queremos, identificar entre esos dos grandes momentos un vinculo de crecimiento crítico, generando nuevos legados, ilustrados a través del aforismo que reza «Nadie sabe lo que tiene, hasta que lo pierde o le sobreviene una crisis que amenaza con pérdidas irreparables».

Esto es  quizá una forma de auto-cuestionarnos ¿qué nos hace falta? para ir o devenir completando algunos círculos virtuosos dentro del humanismo, trascendiendo de lo biológico a lo social cultural: «Nacer, crecer, amar/multiplicarse, morir y dejar un legado», en el supuesto  que otras generaciones de relevo continuarán perfeccionando y perennizando  valores humanistas heredados o legados más consistentes o coherentes con los intentos cotidianos por salir de la barbarie.

De hecho, permanecemos en un estado de cosas diversas que incluyen amistades, enemistades/guerras, encuentros, desencuentros y atisbos  de  convivencia cual PREHISTORIA que le ha tocado vivir a la humanidad desde sus orígenes y en que actualmente estamos sumidos en permanente lucha cotidiana por sobrevivir y acomodarnos con lo que hay, pero sin renunciar a los deseos y aspiraciones de superación individual y colectiva y así podamos disponer recursos abundantes, o al menos suficientes, par alimentarnos bien, dormir bien, permanecer saludables… en fin, vivir bien  que incluye el morir bien y  en paz, habiendo disfrutado una excelente calidad de vida, sabiendo que nos acercamos al amanecer o comienzo de la verdadera HISTORIA realmente humana.